domingo, 20 de junio de 2010

NIEBLA ASESINA INSTANTANEA

Algùn dia en 1984, como es costumbre, llego al aeropuerto El Alcaravàn de El Yopal antes de las seis de la mañana, bajo del transporte y me encamino hacia la torre de control. El extenso horizonte aùn se recorta en negro sobre resplandores rojos, amarillos y azulados.

mientras camino, busco las llaves del edificio en mi bolsillo y observo el cielo alrededor: no hay ni una nube pequeña, es la primera vez en mi vida que veo un cielo tan limpio y, extrañamente, siento tanto frio a la vez; me parece que serà un hermoso domingo llanero y me despreocupo mientras introduzco la llave en el cerrojo.
.
A esta misma hora llegan a la pista de Aguazul un piloto de fumigaciòn y su ayudante para aprovechar el excelente clima, antes de que por alguna razòn se estropee, y preparan su vuelo de fumigaciòn en un pequeño aviòn cessna que màs parece un esqueleto de metal cubierto con tela y con una cabina angulosa con visibildad de 360º, monoplaza , lo cual quiere decir qur sòlo el piloto puede volar en el, pero el ayudante debe viajar en el mismo aviòn junto con su piloto, lo cual hace sentado a horcajadas en una de las ventanillas de la cabina, con un piè dentro de esta y otro por fuera sobre el ala en una posiciòn peligrosa e incòmoda, lo cual ya es una costumbre en el llano, donde los arrozales requieren de oportuna fumigaciòn.
.


Ya en mi cabina de vidrio espero escuchar el rugido lejano de la planta elèctrica de gasolina que alimenta los equipos. Ya Activa la electricidad sintonizo, como es mi costumbre, la frecuencia HF de coordinaciòn radiotelefònoca y llamo:
-Villavicencio, el Yopal.
-Yopalito Villavicencio, buenos dias- responde sin hacerse esperar.
-Buen dia Villavo, El Yopal CAVOK (condiciones de visibilidad y nubes perfectas),viento en calma.
-Erre Yopalito,Villavicencio CAVOK Bogotà normal. No hay trànsito para tu estaciòn.
Las tripulaciones no acostumbran madrugar los Domingos, asì que me limito a escribir lentamente en la vitàcora la hora de apertura y las condiciones meteorològicas aparentemente perfectas.
.
Han transcurrido tal vez cinco minutos desde que hice el primer llamado con el que oficialmente queda puesta en servicio la estaciòn y miro hacia el sur sur oeste, la ruta hacia villavicencio, y veo una delgada lìnea blanca sobre la linea del horizonte y pienso que esta es la primera maravilla de las que se sabe que uno encuentra cuando està lejos de su casa, con este pensamiento, a falta de otras novedades, decido prestarle a este fenòmeno toda la atenciòn.
.
No mucho tiempo ha pasado, tal vez dos minutos, cuando la antes delgada `y plana lìnea blanca se ha convertido en una extensa y densa nube blanca pegada al suelo y està màs cerca, desplazàndose hacia mi a una velocidad que yo nunca habìa visto, ¡pero sin viento!. Notifico entonces a Villavicecio la presencia de Niebla cercana al SSW y mi decisiòn de operar el aeropuerto hacia el NNE para despegues y hacia el SSW para aterrizajes ya que ese cuadrante està muy cubierto por una gruesa nube que aparentementer tiene màs de mil pies de espesor.
.
El avion de fumigaciòn ya està volando y el extraño fenòmeno lo envuelve de repente en todas direcciones, tan ràpido que el piloto nunca previò que aquello ocurrirìa; estando en vuelo queda metido en una densa nube tan repentinamente que apenas alcanza a buscar con la vista la angosta pista de despegue de donde saliò hace unos pocos minutos para tratar de regresar antes de perder del todo a visbilidad, pero esos pocos minutos y no tener radio a bordo para pedir ayuda (ningùn aviòn de fumigaciòn està obligado aùn a llevar uno) lo obligan a asumir un riesgo inasumible. Pierde la pista antes de estar aùn cerca, sòlo su brùjula lo lleva hacia ella sin indicarle a què distancia o direccion con respecto al aviòn està situada. El piloto dà varios giros alrededor de la pista a la mìnima velocidad admisible por su aviòn, lo escuchan varios vecinos pero nadie puede ayudarlo...
.
En medio de los giros de la pequeña aeronave pasa sobre la pista de aterrizaje, pero por su velocidad y poca altitud, el piloto alcanza a verla debajo y tan cerca del aviòn que trata de no volver a perdela, ¿quien sabe si la volverà a encontrar?, y hace un viraje cerrado para aterrizar, un àngulo tan agudo que el aviòn comienza a deslizarse hacia abajo sobre esa ala como en un tobogàn...
.
En el Yopal ocurre algo increible: la niebla recorre el campo tan ràpido como un aviòn al aterrizar, pero no hay viento, y sòlo hace unos segundos hice yo la notificaciòn a Villavicencio, y ya estoy llamando de Nuevo.
.
-Villavicencio El Yopal, aeropuerto cerrado, niebla, visibilidad cien metros.
-Tàn ràpido Yopalito?
-Si Villavo, asì de ràpido.
.
Recuerdo la clase de meteorologìa cuando mi profesor nos informò que las condiciones para que aparezca la niebla son sencillas: cielo despejado para que la tierra pierda calor en forma de radiaciòn infrarroja pues de otro modo las nubes, sobre todo las bajas, hacen un pequeño efecto invernadero local que hace que la tierra no se enfrìe, cero viento y atmòsfera saturada de humedad; el vapor en contacto con el suelo se condensa e inicia un efecto en cascada que enfrìa y condensa el vapor encima suyo y este hace lo mismo.
.
Nada que hacer ya, el tiempo corre lento, nada màs largo que el ocio sin alternativas. Pasa casi una hora y por fin llama el helicòptero de un pozo petrolero en alguna parte del llano para romper la tediosa monotonìa de estar metido en esta nube:
.
-Yopalito solicito aterrizar en su estaciòn.
.
-negativo, aeropuerto cerrado, niebla, visibilidad, cien metros.
.
No esperaba nueva repuesta del piloto,me quedè estupefacto cuando el piloto del helicòptero me insistiò de nuevo:
.
-Autorìzame al grupo de caballerìa Centauros entonces, llevo a dos heridos de un aviòn de fumigaciòn que se estrellò y se incendiò en la pista de Aguazul..............................

No hay comentarios: